"Alguien dijo, o escribió, que en aquellos tiempos famosos y terribles los españoles peleabamos todos, desde nobles hasta labriegos. Y era cierto. Unos lo hicimos por hambre de gloria y dinero, y otros por hambre de verdad: por sacudirnos de encima la miseria y llevar un trozo de pan a la boca. En los campos de batalla de medio mundo, desde las Indias a las Filipinas, el Mediterráneo, el Norte de África y Europa entera, contra toda clase de naciones bárbaras o civilizadas, peleamos hidalgos y ca