El Tribunal Militar Central identificó entre 2004 y 2015 un total de 174 denuncias relacionadas con distintos tipos de acoso en las Fuerzas Armadas y dictó por acoso sexual 12 sentencias condenatorias, tres absoluciones y dos casos fueron sobreseídos, siendo la mujer la víctima en la mayoría de los casos.Así lo refleja el estudio específico sobre la situación de las medidas de prevención, formación y apoyo a las víctimas de acoso sexual, laboral y profesional en las Fuerzas Armadas, elaborado por el Observatorio de la Vida Militar, remitido a la presidenta del Congreso.Se trata del primer estudio que presenta una radiografía de la situación y aporta datos de la jurisdicción militar sobre denuncias relacionadas con el acoso sexual, profesional y por razón de sexo o género en los cuarteles.El Tribunal Militar Central pudo identificar, entre 2004 a 2015, y referidos a las Fuerzas Armadas, 174 denuncias relacionadas con acoso, de las cuales 110 fueron archivadas, 7 remitidas a la autoridad disciplinaria, 11 resultaron inhibidas a otros órganos y finalmente 46 fueron consideradas de naturaleza penal.
http://www.elmundo.es/espana/2018/01/28/5a6db509268e3eee2b8b45bb.html
Respuestas
La justicia sea la que sea es lenta y aveces ciega, es decir no es perfecta.
Es la justicia castrense y por tanto aún sigue habiendo al igual que en la justicia eclesiástica mucho encubrimiento o incredibilidad de la mierda que le surge. Aunque hay que reconocer que cada vez se va progresando, y de ahí que haya más denuncias aceptadas, con sentencias firmes, cosa que antes no ocurría. Supongo que las cosas de palacio van despacio. Hay organismos que les cuesta actualizarse y comprometerse, y eso como ya sabemos no es nuevo.
no me hables de los curas pedofilos que me ponen de los nervios, hijos de la grnadisima puta que son y no pagan sus aberrantes delitos... tocando y violando a niños pobrecillos.
En casos tan graves como en la pedofilia dentro del terreno de los curas eso es criminal y no tiene perdón.
Lo normal es que no tengan un trato diferente este tipo de gente por el simple hecho de ser curas, deberían de ser tratados como lo son entrenadores de deporte, padres, etc. El que sea acusado debería de apartarse automáticamente de la Iglesia o ser expulsado, y mientras que no de demuestre su inocencia, me parece poco acertado que sea al contrario, y que mientras que no se demuestre la culpabilidad sigan actuando contra la inocencia de los niños.