Se llama Randall Margraves y este viernes ha captado la atención de Estados Unidos. Él es el padre de tres de las víctimas del Larry Nassar, el médico del equipo de gimnasia de Estados Unidos y tal vez el mayor depredador sexual que se ha contabilizado. Dentro de la sala de justicia de un tribunal de Michigan, Margraves trató de abalanzarse sobre el acusado y tomarse la justicia por su mano.
“Por favor, relájese, simplemente relájese”, le decían los policías que de inmediato le derribaron y evitaron la agresión. Una vez esposado, y tras contar tres, los uniformados los pusieron en pie y se lo llevaron. Previamente, la juez Janice Cunningham ordenó la evacuación de Nassar.
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