La Operación Active Endeavour fue una decisión de la OTAN de vigilancia en el Mediterráneo puesta en marcha en octubre de 2001 tras los atentados acontecidos en EE.UU. el 11 de septiembre de 2001. La misión principal es la seguridad del tráfico marítimo en las aguas internacionales del Mediterraneo y aproximaciones del Estrecho de Gibraltar de cara a la lucha contra el terrorismo internacional, tráfico de armas y seguridad de infraestrúcturas.

El compromiso de España consiste en el aporte desde medios terrestres de supervisión de tráfico marítimo y de medios navales mediante una fragata, un buque de apoyo de combate, un patrullero de altura a disposión de salir a la mar en 48 horas a petición, un submarino en dos períodos de 45 días, uno por semestre y aviones de patrulla marítima.

La Operación Sea Guardian es una actualización técnica de la anterior a partir de julio de 2015 y en la que España además de lo anterior queda en disposición de participar con buque de mando con un Estado Mayor embarcado y disponible para para liderar una operación así como la disposición de las bases de Cartagena y Rota en lo necesário. Colabora diréctamente con la Operación Sophia de la UE en el Mediterráneo Central.

La Operación Sea Guardian a sido liderada por España en varias ocasiones como durante el primer semestre de 2018 y el segundo de 2019. Entre otros buques españoles han participado la fragatas Numancia, Navarra, Reina Sofia; la patrullera de altura Serviola y los submarinos Galerna, Tramontana y Mistral