El Conde Ricla, Antonio Funes de Villapando, a la sazón Capitán General de la Isla aprobó el proyecto que le presenta el ingeniero Silvestre de Abarca del segundo sistema defensivo: las fortalezas San Carlos de La Cabaña, Santo Domingo de Atarés y el Castillo del Príncipe.
Para edificar este último se escogió la Loma de Aróstegui, y se le encargó al ingeniero Agustín Cramer Mañera, que con los diseños del ingeniero Abarca, comenzara las obras en 1767, no terminándose por completo hasta después